domingo, 3 de agosto de 2014

Pinturas murales restauradas para los pisqueños


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El Templo Belén, ubicado en la calle Comercio 215, vecindario de la Plaza Belén, alberga la imagen más querida y venerada por los pisqueños, el Señor de la Agonía, Santo Patrono de Pisco. Su actual altar y cúpula fueron construidos en 1954; el artista Gilberto Paz T. pintó imágenes santas en sus paredes en 1968. En el altar Mayor, la vida y obra de San Martín de Porres, la obras de Santo Toribio de Mogrovejo, San Francisco Solano y Santa Rosa de Lima. En la cúpula se aprecia a profetas y evangelistas entre los que se distingue a San Mateo y
San Marcos, además de pasajes bíblicos en el techo del templo.
El santuario, desde tiempos antiguos, fue conocido como el Templo de los Indios, siendo la devoción por el Señor de la Agonía  desde 1916, año en el que recién se trajo la imagen al lugar y se realizó su primera procesión.
El terremoto del 15 de Agosto del 2007, afectó el monumento, resquebrajando sus paredes. Lo extraordinario y que fue considerado como un milagro por los pisqueños es que no se afectó grandemente la cúpula, donde está ubicado el Señor de la Agonía con su altar; las pinturas murales sí quedaron parcialmente dañadas.
En 2010 se reforzó la cúpula y el 26 de Octubre del mismo año se restauró las pinturas dañadas, quedando remozadas luego de un esmerado trabajo pictórico de dos meses de duración realizado por el artista pisqueño Oscar Estrada Magallanes. Para este trabajo, el artista se sirvió de las fotografías de la época, tratando de recuperar los tonos de las pinturas originales. Los personajes sagrados como San Martín de Porres y Santa Rosa de Lima, que son emblemáticos del templo, fueron pintados con sus escenas milagrosas.
Asimismo, los profetas ubicados en la cúpula se muestran en gran tamaño y en simbólicas actitudes religiosas y devocionales. Actualmente, el templo es muy visitado por fieles y turistas, quienes acuden a visitar la imagen del Señor de la Agonía, su altar restaurado y las pinturas murales que ofrecen paz espiritual y ambiente de oración.
La obra de restauración del templo y de las pinturas murales fue financiada por la Empresa Plus Petrol y la Municipalidad Provincial de Pisco.

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